Nos encontramos en la semana del afectado por meningitis, y por eso quiero hablaros de esta enfermedad.
Vamos a empezar por el principio. Para entender qué es la meningitis primero tenemos que saber qué son las meninges.
¿Qué son las meninges?
Son unas membranas que envuelven y protegen el sistema nervioso central, es decir, el encéfalo y la médula espinal.
**Ojo: Los huesos del cráneo no sólo contienen al cerebro, también al cerebelo y al tronco encefálico. Esas 3 partes forman el encéfalo, y todas ellas están cubiertas por las meninges.
Fuente: MSDManuals.
Justo este año se ha descubierto una capa desconocida hasta ahora, con lo que en total habría 4 meninges.
Estas finas “telas” o capas están formadas por células de distintos tipos y entre ellas circula líquido cefalorraquídeo. Este líquido aporta oxígeno y glucosa al cerebro, amortigua golpes y lo protege de sustancias químicas que puedan hacerle daño. A través de las meninges pasan los vasos sanguíneos que llegan al encéfalo.
Resumiendo: La función principal de las meninges es la de proteger al sistema nervioso central de daños físicos (amortiguando golpes), químicos y biológicos (infecciones).
Fuente: Wikimedia Commons.
¿Qué es la meningitis?
Es la inflamación de las meninges. Se trata de una enfermedad muy grave. Puede ser provocada por virus, bacterias, hongos o parásitos. En menor medida también por ciertos fármacos u otras causas.
La meningitis causada por virus es más común pero más leve. Sin embargo, la meningitis causada por bacterias, aunque menos común, es la más peligrosa y puede ser mortal en cuestión de horas.
Muy relacionada con la meningitis, ya que puede ser una complicación de esta enfermedad, encontramos la sepsis o septicemia. La septicemia o sepsis es la presencia de bacterias en la sangre, que puede dar lugar a una infección en todo el cuerpo. Es muy peligrosa.
El principal factor de riesgo para desarrollar meningitis es la edad. Esta enfermedad afecta principalmente a niños menores de 5 años y jóvenes de entre 15 y 24 años.
Según la Asociación Española contra la Meningitis se trata de la primera causa de muerte por infección en niños y adolescentes. También son población de riesgo las embarazadas, si toman alimentos que puedan estar contaminados por Listeria, una de las bacterias que puede provocar la meningitis.
Al tratarse de una enfermedad infecciosa, aquellas personas en contacto con alguien que padezca la enfermedad tiene más riesgo de padecerla.
Pero no sólo es grave porque pueda causar la muerte, las secuelas de la meningitis pueden ser muy serias: minusvalía, debilidad en brazos y/o piernas, problemas en el habla, el lenguaje y la memoria, convulsiones, pérdida de sentidos (el oído o la vista), daño cerebral, deformidades y amputación de extremidades.
¿Cómo identifico una meningitis?
Al principio es complicado porque son síntomas de enfermedades tan comunes como un resfriado, una gripe o una gastroenteritis: fiebre, dolor de cabeza, vómitos, irritabilidad en bebés, falta de apetito, decaimiento o diarrea en algunos casos.
Pero sí que hay síntomas característicos de la meningitis causada por bacterias que nos pueden alertar de la enfermedad:
- En bebés: Fontanelas hinchadas.
- Dolor en músculos y articulaciones (generalmente en las piernas) las piernas. *
- Confusión, delirio.
- Respiración más rápida de lo normal. *
- Fotofobia (sensibilidad anormal a la luz).
- Pies y manos fríos. *
- Temblores.
- Piel azulada. *
- Rigidez de cuello.
- Pérdida de conciencia y convulsiones.
- Petequias: puntos rojos o morados en la piel que no desparecen con la presión. Aparecen primero en el torso. Para saber si son petequias o no se puede hacer el test del vaso: pasar un vaso de cristal por la zona en que estén las manchas. Si no desaparecen, son petequias. Si esto ocurre hay que ir rápido a urgencias. *
Los síntomas que os marco con un asterisco (*) aparecen en la septicemia.
Fuente: Fundación para la investigación de la Meningitis de Reino Unido.
Si estos síntomas aparecen, y además el niño tiene fiebre sin causa aparente puede tratarse de meningitis y hay que ir a urgencias.
¿Cómo se evita?
La forma más eficaz de prevención son las vacunas. Existen vacunas que se ponen cuando somos bebés o niños pequeños (depende del calendario de vacunas de cada país). Algunas son vacunas contra bacterias que pueden provocar meningitis, como el meningococo, el neumococo o la Haemophilus influenzae.
También hay vacunas que protegen de virus que pueden provocar meningitis, como el virus del sarampión, el de la varicela, y el de la parotiditis.
Además, igual que con otras enfermedades infecciosas, es muy importante la higiene. Por ejemplo, lavándonos las manos.
Otra forma de prevención es proteger nuestro sistema inmune llevando unos hábitos saludables (evitar tóxicos como el alcohol, el tabaco y otras drogas, una buena alimentación, ejercicio físico…).
Como siempre, os dejo más información en las fuentes que he consultado aquí abajo.
Fuentes:
https://contralameningitis.org/
https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/meningitis
https://www.mayoclinic.org/es-es/diseases-conditions/meningitis/symptoms-causes/syc-20350508
https://www.cun.es/enfermedades-tratamientos/enfermedades/meningitis
https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/000680.htm
Imágenes:
https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Meninges-es.svg
Foto de Kelly Sikkema en Unsplash