La energía en el cielo afecta a tu vida, pero no como te cuentan.

Hace unos días escuchaba un podcast en el que se entrevistaba a una astróloga. Y para hablaros de este tema, la astrología, y no hacer una tesis de un montón de cosas… voy a tratar un par de puntos que se mencionan en el podcast. Pero empecemos por el principio.

¿Qué es la astrología?

Según la RAE, la Real Academia de la lengua Española, la astrología es el estudio de la posición y del movimiento de los astros como medio para predecir hechos futuros y conocer el carácter de las personas.

Es una pseudociencia, porque no tiene ninguna base científica, al contrario que la astronomía, que es la rama de la ciencia que estudia los cuerpos celestes o astros (estrellas, planetas, satélites…), su posición, movimientos, los fenómenos que les rodean y cómo se relacionan entre sí.

Pero, para no reducir mi argumento a «la astrología es una pseudociencia porque lo dice la ciencia», os voy a contar porque el ser de un signo del zodiaco no repercute en nuestra personalidad y porque que un planeta esté en tal o cual sitio no nos afecta. A menos que ese planeta venga a estamparse contra nosotros.

Lo que la señora del podcast comentaba (no voy a dar nombres para no señalarla ni darle publicidad) es que la energía del universo se refleja en nuestra energía interior.

Vamos a empezar por ver qué es la energía.

La energía es la capacidad que tiene un cuerpo para realizar un trabajo. Es una magnitud física, algo que se puede medir. Y puede presentarse de distintas maneras. Hay muchas clasificaciones de la energía, pero los tipos fundamentales son:

Energía mecánica: Está relacionada con el movimiento de un cuerpo. Puede ser cinética o potencial. Pero no vamos a ahondar más en ello.

Energía química: Es la que está en los enlaces químicos que unen átomos o moléculas. Por ejemplo, la que está en los enlaces químicos de una proteína.

Energía radiante o electromagnética: Es la que tienen las ondas electromagnéticas: la luz, los rayos X, las ondas de radio, la wifi…

Energía eléctrica: La que producen los electrones al moverse, es decir, las corrientes de electricidad.

Energía térmica o calor: Es la que producen las moléculas al moverse.

Energía nuclear: Es la que se encuentra en el interior de los átomos, en su núcleo.

Y… ¿qué energía hay en el universo? ¿qué energía tienen los astros?

Dado que la astrología se centra en los planetas, el Sol y la Luna vamos a ver qué energía tienen cada uno de ellos y cómo influyen a la Tierra.

Planetas: Tienen energía mecánica debido a que se están moviendo constantemente en su órbita alrededor del Sol. También tienen energía térmica o calor y reciben energía electromagnética del Sol. Por supuesto poseen energía nuclear y energía química, porque están hechos de materia (ya sea roca, gas o hielo), por tanto están hechos de átomos y moléculas. Y además tienen energía eléctrica, cosa que podemos observar cuando tienen lugar tormentas en sus atmósferas.

O sea, los planetas están cargados de energía. Pero ¿nos afecta a nosotros? Pues siento decirle a los seguidores de la astrología que no.

Según la NASA, la única forma en que los planetas del sistema solar afectan al nuestro, La Tierra, es a través de la fuerza de la gravedad.

Luna: Por las mismas razones que hemos mencionado en los planetas, nuestro satélite también tiene energía. Pero, de nuevo, sólo nos influye a través de la gravedad y su efecto en las mareas.

Sol: Este sí. Nuestra estrella sí que nos transmite energía. ¡Vaya que si lo hace! Principalmente energía electromagnética. También nos afecta la gravedad, pero vamos a la energía.

En el podcast decía esta mujer que si Mercurio está retrógrado (no sé que narices significa eso), se ven afectadas las comunicaciones. «Cuando Mercurio está retro se cae la llamada de Zoom» decía.

Mercurio no hace que fallen las comunicaciones, pero el Sol sí.

El Sol, entre otras cosas, nos da calor y luz. O lo que es lo mismo, radiación. A veces el Sol puede enviarnos más energía de lo habitual. Esto ocurre durante las tormentas solares, que son como explosiones en su superficie. Esto provoca alteraciones en las comunicaciones por radio y en el funcionamiento de los GPS y de la red eléctrica, pudiendo dejarnos sin electricidad por un tiempo.

Entonces el Sol nos manda energía, pero ¿cómo afecta a nuestro cuerpo?

Pues provocándonos cáncer de piel si no nos protegemos, ayudándonos a fabricar vitamina D en nuestra piel, y dándonos calor y comida. Las plantas se alimentan de luz y nosotros nos comemos las plantas y a los animales que se comen las plantas.

Esa energía que nos metemos en el cuerpo en forma de comida es energía química que se va transformando en nuestro metabolismo.

Entonces, ¿los astros no afectan a mi personalidad? Pues si eres fan de las cartas del tarot y el horóscopo siento decirte que no. Ni los planetas, ni el Sol, ni la Luna y sus fases, ni los eclipses.

La carta natal, la carta astral, tu signo del zodiaco… se basan en la supuesta posición de las estrellas (constelaciones) en el lugar, día y hora en qué naciste.

La personalidad es algo muy complejo que se forma en base a factores biológicos y ambientales como nuestro neurodesarrollo o nuestro aprendizaje. No se puede clasificar a la gente en cajitas de personalidad determinadas por cuando y donde nacieron.

Y para los que hayáis sido capaces de aguantar hasta aquí os dejo lo más interesante del artículo.

Pero antes, dime si te sientes identificado o identificada con alguna de las siguientes frases:

-Tienes la necesidad de que otras personas te quieran y te admiren, y sin embargo eres crítico/a contigo mismo.

-Tienes una capacidad considerable que aún no has utilizado.

-A veces tienes dudas de si has actuado bien o tomado las decisiones correctas.

-Algunas de tus aspiraciones tienden a ser bastante irrealistas.

¿Te identificas con alguna?

Pues acabas de caer en el Efecto Forer o falacia de la validación de la personalidad.

El psicólogo B.R. Forer descubrió a mediados del siglo pasado que las personas tendemos a aceptar como propias descripciones generales y vagas de la personalidad.

Además, tendemos pensar que nos representan afirmaciones sobre nosotros, aunque sean falsas, porque queremos ser así. Por ejemplo, si me dicen que soy muy extrovertida puedo creer que soy así porque me gustaría ser así, aunque en el fondo sea introvertida.

Forer le dió a sus alumnos un supuesto test de personalidad con frases como las anteriores y todos creyeron que les definían, sin saber que todos tenían el mismo texto. Este experimento se ha repetido muchísimas veces desde entonces y siempre se obtiene el mismo resultado. Os dejo más información de este experimento en las referencias.

Este truco, y otros, son los que se utilizan cuando te echan las cartas o lees el horóscopo.

Si has aguantado leyendo hasta aquí GRACIAS. Y si eres de los que cree en el horóscopo y has aguantado esta chapa, eres de las personas con las que merece la pena debatir.

Referencias:

https://www.theclaycenter.org/wp-content/uploads/2016/10/Energy-Curriculum-Forms.pdf

https://icaen.gencat.cat/es/energia/que_es/

https://energia-nuclear.net/energia/tipos https://www.universidadviu.com/es/actualidad/nuestros-expertos/que-son-materia-y-energia

https://www.ceupe.com/blog/clasificacion-de-la-energia.html

https://www2.uned.es/biblioteca/energiarenovable3/energia.htm

https://www.universidadviu.com/int/actualidad/nuestros-expertos/astronomia-y-astrologia-cual-es-la-diferencia#:~:text=La%20mayor%20diferencia%20que%20encontramos,define%20como%20una%20creencia%20pseudocient%C3%ADfica

https://image.gsfc.nasa.gov/poetry/venus/q189.html

https://science.nasa.gov/heliophysics/big-questions/how-does-solar-variability-affect-human-society-technological-systems-and-the-habitability-of-planets

https://spaceplace.nasa.gov/constellations/en/

https://www.quickanddirtytips.com/education/science/is-astrology-real

Efecto Forer